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Las plantas que pueden matarteLas plantas adornan nuestros jardines y muchas de ellas sirven para elaborar medicamentos. Sin embargo algunas son, literalmente, mortales. Como podrás ver aquí, no siempre debemos fiarnos de su apariencia. Una planta que parece totalmente inofensiva puede matarte en sólo unas horas si ingieres por ejemplo, sus semillas, sus frutos o sus hojas. La Cicuta (Cicuta maculata) Si te encuentras con una planta salvaje parecida a la chirivía comestible o al apio ¡no te acerques a ella! Tal vez se trate de la Cicuta, la planta más tóxica de América del Norte. En Canadá se encuentra sobre todo en Quebec, cerca de las orillas del río San Lorenzo. La cicuta pertenece a la misma familia de la planta que mató a Sócrates y contiene mucha cicutoxina, una toxina que provoca síntomas desagradables como espasmos abdominales, convulsiones y náuseas. Incluso puede provocar la muerte. Quienes sobreviven pueden experimentar también amnesia y temblores. La parte más tóxica de la planta es la raíz. El ricino (Ricinus communis) A primera vista el ricino parece un arbusto común, pero no lo es. Las semillas de esta planta originaria de África están compuestas por una proteína muy tóxica que se llama ricina. Ésta es tan tóxica que sólo dos o tres semillas son suficientes para provocar la muerte de un niño y el doble para matar a un adulto. Los otros síntomas conocidos son: vómito, diarrea y convulsiones. En 1978 el periodista búlgaro Georgi Markov murió envenenado por semillas de ricino. La flor de adelfa (Nerium oleander) ¿Tienes una flor de adelfa en tu casa? Si hay niños en tu hogar entonces deberías deshacerte de esta planta de interior. Sus hojas y tallos contienen oleandrina, una substancia tóxica que provoca dolores abdominales, diarrea, mareos, irritación de la boca, náuseas, somnolencia, coma o incluso la muerte. Cuando crece en la naturaleza, la flor de adelfa es peligrosa para los animales. Las abejas que liban sus flores pueden contaminar la miel, enfermando así a los humanos que la consuman. La brugmansia o floripondio La brugmansia se conoce también como floripondio o trompeta de los ángeles y el nombre le viene bien, pues las flores tienen forma de trompetas que caen. En los Andes esta planta es utilizada desde hace miles de años por los chamanes, pues es conocida por los transes severos que provoca. Otros síntomas son: vómitos, alucinaciones y muerte por paro cardíaco. La belladona (Atropa belladonna) Ya en el siglo XIII Santa Hildegarda desaconsejaba ingerir los frutos de la belladona, planta que se asoció con la magia negra durante mucho tiempo. Aunque tienen buena apariencia (como pequeñas cerezas negras), los frutos de la belladona son extremadamente tóxicos. Están llenos de atropina y escopolamina, toxinas que al ingerirse provocan la parálisis de los músculos y, en algunos casos, del corazón. Las hojas y las raíces de esta planta también son peligrosas, el simple contacto físico con las hojas de la belladona irrita la piel. A dosis altas, los productos tóxicos que se encuentran en la savia provocan la muerte. Regaliz americano (Abrus precatorius) Es originario de las regiones tropicales y sus atractivas semillas sirven para fabricar joyas (son de color rojo y negro). ¡Pero no debes ingerirlas ni masticarlas! Una sola semilla bastaría para matarte. Las semillas contienen abrina y tres microgramos de esta substancia química tóxica bastan para provocar la muerte de un adulto. Otros síntomas son: dolores abdominales, náuseas, vómitos y edema cerebral. Eupatorium rugosa (Eupatorium rugosum) La eupatorium rugosa es una planta fácilmente reconocible por sus pequeñas hojas blancas y sus hojas ovales. Se encuentra en Norteamérica, principalmente en el este de Canadá. En el siglo 19 esta planta provocó la “enfermedad de la leche”. En aquella época algunos pueblos canadienses perdieron un cuarto de su población por causas desconocidas. Más tarde se supo que la eupatorium rugosa era la responsable. Las vacas que comían esta planta transmitían a su leche una toxina que provocaba parálisis intestinales, vómitos e incluso la muerte. El tabaco (Nicotiana tabacum) Desde que Cristóbal Colón lo descubrió en el continente americano en1492, el tabaco (que los Amerindios utilizaban) invadió el planeta. En su estado salvaje o seco, está presente en todos los países del mundo o casi. Fumarlo es peligroso para la salud, pues aumenta los riesgos de desarrollar cáncer de pulmón, entre otros. Pero las hojas del tabaco también son peligrosas. La anabasina que se encuentra en las hojas puede causar la muerte. En algunas personas el contacto con las hojas de tabaco provoca eccema. Laureola (Daphne laureola) La laureola es un arbolillo que se encuentra sobre todo en los jardines públicos y privados. Aunque sus frutos parecen deliciosos, no hay que consumirlos. Las toxinas (daphnetoxina, dihydroxycoumarina y mezereína) que contienen provocan diarrea, dolores abdominales, irritaciones de la boca, sensaciones de sed y a veces sangrados internos que llevan a la muerte. No sólo los frutos son dañinos, también los tallos y las hojas, así que más vale no acercarse a ellas. Quienes se exponen a mayor riesgo de intoxicarse por la laureola son los niños. El tejo (Taxus baccata) El tejo es una pequeña conífera de frutos rojos que se encuentra en el sur de Canadá. Desde la prehistoria sus propiedades tóxicas se utilizaban para envenenar las flechas. Debemos decir que las hojas, las semillas y el polen contienen taxina, un producto químico altamente tóxico. Cuando se ingiere puede provocar agitación, convulsiones, dilatación de las pupilas, problemas de coordinación motora, temblores y la muerte. Acónito (Aconitum napellus) El acónito puede reconocerse fácilmente por sus flores color violeta. No te dejes engañar por su bella apariencia, pues esta planta es muy tóxica. Por eso es que desde la antigüedad se usa como veneno. Según la mitología griega el acónito proviene de la saliva de los colmillos de Cerbero, el famoso monstruo de tres cabezas que se interpuso en el camino de Hércules (mitología griega). En el año 183, para no caer en manos de los romanos, Hannibal se quitó la vida con una mezcla que contenía acónito. Los Borgia, en el renacimiento, utilizaban esta planta como veneno. Además de ser fatal cuando se ingiere, el acónito provoca agitación, debilidad, picazón, retracción de la garganta, náuseas y vómitos. Baya blanca venenosa (Actaea pachypoda) Esta es una planta que se popularizó en la película Minority Report , de Steven Spielberg, pues intoxica al personaje interpretado por Tom Cruise. En la vida real, las bayas blancas de esta planta pueden hacer que el corazón se detenga y así provocar la muerte. El bonetero (Euonymus europaeus) El bonetero es un arbusto que crece sobre todo en el sur de Canadá. Se le identifica fácilmente por sus frutos color anaranjado. A veces se utilizan para aclarar el cabello, sin embargo estos frutos no deben ingerirse nunca. Su consumo (o el de alguna otra parte de la planta) provoca convulsiones, alucinaciones, vómitos, aumento del ritmo cardíaco y, en algunos casos, la muerte. Laburno (Laburnum anagyroides) El laburno es un pequeño árbol de flores amarillas que crece en el suroeste de Ontario y en Colombia Británica, Canadá. Desde el siglo 19 se sabe que todas las partes de esta planta son tóxicas. La ingestión de las vainas y semillas provoca (sobre todo en los niños), distintos síntomas como vómitos, náuseas, confusión, dilatación de las pupilas, mareos, debilidad respiratoria y debilidad general. A veces, incluso la muerte. 23 vainas serían suficientes para provocar la muerte de un adulto. La lantana o banderita española (Lantana camara) Si has estado en un vivero tal vez hayas visto las lantanas. Son arbustos provenientes de las Antillas y se caracterizan por tener hojas de color verde obscuro y flores violetas, blancas y amarillas. Aunque esta planta es muy bonita no deben ingerirse sus hojas ni sus frutos si no están maduros, pues puedes experimentar vómitos, diarrea, dificultad para respirar, letargia, cianosis o incluso caer en coma. También puedes morir. Muérdago de roble (Phoradendron flavescens) El muérdago de roble es una planta muy popular en tiempos de Navidad, pues se utiliza como decoración. Si tienes niños deberás asegurarte que no consuman sus hojas ni sus frutos, pues podrían intoxicarse gravemente. Además de provocar síntomas parecidos a los de la gastroenteritis, el muérdago de roble puede provocar un paro cardíaco y la muerte. El estramonio común (Datura stramonium) El estramonio común también es conocido como “yerba de los locos” porque provoca alucinaciones y delirio. Se le reconoce fácilmente por sus grandes flores blancas o violetas y por su fuerte olor. Todas las partes de la planta son tóxicas, pero las más peligrosas son sus frutos, granos y flores, pues son los más atractivos. Además de los síntomas mencionados anteriormente, el estramonio común provoca resequedad de la boca, sarpullido en cara y cuello, movimientos involuntarios, visión borrosa, fiebre, taquicardia, coma y muerte. En inglés, esta planta se llama “jimsonweed”, en referencia a la ciudad de Jamestown en Estados Unidos. En el año de 1679, unos soldados británicos instalados en esa ciudad se enfermaron gravemente luego de haber comido una ensalada que contenía hojas de estramonio. Zigadenus (Zigadenus venenosus) Durante la primavera crece el zigadenus en el oeste canadiense y es una de las plantas más tóxicas. Además de que envenena a los borregos, puede enfermar a los humanos que la ingieren. A veces esto sucede de manera accidental, pues los bulbos de esta planta pueden confundirse con cebollas. Pero los bulbos de zigadenus no sólo provocan picazón en la boca sino que la zygacina contenida en éstos disminuye la presión arterial, provoca diarreas, vómitos, somnolencia, coma y la muerte. Todas las partes de la planta son igualmente tóxicas. La Digital o chupamiel (Digitalis purpurea) La digital se cultiva en Canadá y es utilizada en el medio farmacéutico, entre otros. Pero eso no significa que sea comestible. La ingestión del tallo, de las hojas, flores o semillas provoca fuertes dolores abdominales, diarrea, náuseas, problemas cardíacos y la muerte. La muerte de camas (Toxicoscordion venenosum) La muerte de camas es una planta parecida a la hierba común y que a veces alcanza los 70 centímetros. Crece principalmente en el este de Canadá y de Estados Unidos. La ingestión de una pequeña cantidad de esta planta puede provocar la falla de los órganos internos y llevar hasta la muerte ![]() |
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